El modelo de negocio: estas son las claves para triunfar en el mercado
Emprender es una tarea emocionante, pero requiere de muchos conocimientos. A la hora de definir un buen modelo de negocio, es importante tener en cuenta apartados como la búsqueda de financiación, la estructura productiva, las características del producto e incluso la fórmula de trabajo que se va a proponer, por ejemplo, a través de un comercio electrónico.
Esta es, precisamente, la primera tarea que se debe acometer al planificar un modelo de negocio. Empieza por definir bien todas las categorías que tendrá tu futura empresa, prestando atención a aquellos ámbitos que requerirán de un buen desembolso inicial futuro, como es el caso de la digitalización o la internacionalización.
En este artículo te enseñamos qué debes hacer si quieres tener un modelo de negocio que te permita sobreponerte a cualquier desafío que surja durante la época del coronavirus. Para poder redactar un documento en condiciones, no dudes en pedir asesoramiento profesional, de forma que puedas dejar reflejado por escrito cuál es el core business o la parte central de tu negocio.
Sigue estos pasos y diseña un modelo de negocio perfecto para tu empresa
De la misma forma que emprender es emocionante, ser un emprendedor puede llegar a ser muy estresante, porque es necesario conocer a fondo la documentación o los procesos administrativos necesarios para constituir una empresa, además de tener claros cuáles van a ser los gastos iniciales en función de las tasas que estén impuestas por las Administraciones.
El primer paso consiste en saber cómo van a llegar los productos y servicios hasta los clientes finales. Define el producto y la forma en la que vas a llegar hasta el consumidor, empleando herramientas como Business Model Canvas para analizar todos los elementos clave en un mismo papel. De esta forma, podrás construir un producto mínimo viable que luego podrás presentar a los clientes en fase experimental.
La fórmula del BMC está diseñada para que puedas tener de un simple vistazo factores como el producto a ofrecer, la propuesta de valor que viene asociado a él, la situación económica y demográfica de los clientes potenciales o el método que vas a seguir para comunicarte con ellos, con los socios clave o con los proveedores. En último lugar, conocerás de cerca las actividades clave necesarias para la empresa, así como los gastos e ingresos asociados.
Ahora que tienes todo listo, ya puedes probar tu idea con los recursos mínimos, sin tener que hacer un desembolso inicial importante. Puedes probar tu producto al mercado en forma de producto mínimo viable, lo que te permitirá comprobar si hay gente interesada en él y cuál es el precio que están dispuestos a disfrutar. En esta fase de diseño, es importante que definas muy bien cuáles van a ser las funciones mínimas que vas a implementar, lo que te permitirá ahorrar costes innecesarios en el corto plazo.
Cuando conozcas las opiniones y las recomendaciones de tus clientes, será el momento de evaluar los resultados. Escribe todos los fallos que hayan encontrado en un documento, acompañados de las sugerencias de mejora que te hayan hecho, de forma que lo tengas fácil para acomodar tu producto al mercado con las mejores garantías de venta. Esta información será de utilidad para reformular la idea o el modelo de negocio, de forma que se dirija hacia una estructura de trabajo optimizada que cumpla las necesidades de los clientes.
Y, si necesitas ayuda en cualquier punto de este proceso, no dudes en solicitar asesoramiento profesional. En Caja Rural Central ponemos al servicio de nuestros clientes el asesoramiento personalizado por parte de un equipo de profesionales que puedan ayudar a los emprendedores, empresarios y autónomos a detectar sus oportunidades y necesidades financieras. Además, te darán consejos útiles para que puedas optimizar todas tus partidas en las etapas iniciales de tu empresa, de forma que puedas preparar tu crecimiento con absoluta comodidad.
En último lugar, tienes que comprobar si tu modelo de negocio es realmente viable para su lanzamiento al mercado. Encárgate de hacer una planificación financiera en el corto y medio plazo, un apartado en el que suelen fallar muchos emprendedores, prestando atención a costes imprevistos en las instalaciones de energía de las oficinas, de forma que consigas que los ingresos que se obtengan cada año sean equivalentes a las inversiones y los gastos que se realicen en cada ejercicio. Esto te permitirá contar con un colchón financiero para resolver las necesidades del negocio en sus primeras etapas de vida.
Existen cinco ámbitos que debes tener en cuenta para planificar tu modelo de negocio: el sistema productivo, el diseño del producto, las tramitaciones legales y la estructura financiera del negocio. Si sigues estos consejos conseguirás cubrirlos uno a uno dentro de tu documento, que te permitirá atraer futuros inversores para consolidar todas tus ideas dentro del mercado.